El pasado sábado 12 de abril unos cuantos miembros del grupo (Carlos Ponce, Eva Serrano, Mar Labrador, Esperanza Iranzo y Cristian Pérez), visitamos la laguna de Meco con la intención de disfrutar de este bello paraje que tenemos a tan escasa distancia de Madrid, encontrándonos para ello a las 8 de la mañana en los alrededores de dicho humedal. Para aquellos que aún no sepan cómo llegar a la laguna, la manera más sencilla es coger la A-2 dirección Zaragoza y tomar la salida 38 dirección Meco, tras separarnos de la autovía unos 2 kilómetros llegamos a una gran glorieta con 3 posibles salidas (Meco, peaje y polígono industrial), es ésta última salida la que debemos coger para llegar hasta el final del polígono industrial, en cuyas inmediaciones se encuentra la laguna.
Antes de llegar a la laguna en sí, algunas parejas de chorlitejos chicos (Charadrius dubius) y de cigüeñuela común (Himantopus himantopus), y los cantos de los alcaravanes (Burhinus oedicnemus) hacían presagiar el inicio de una gran mañana.
Ya desde la laguna, un único ejemplar de andarríos bastardo (Tringa glareola) se dejaba ver a placer para nuestro regocijo. Y apenas unos minutos después saltaba la sorpresa, entre los tarays se dejaba ver un nutrido grupo de cercetas carretonas (Anas querquedula), ambas dos, especies difíciles de ver en la Comunidad de Madrid.
En el agua zampullines comunes y cuellinegros (Tachybaptus ruficollis y Podiceps nigricollis), ánades frisos y reales (Anas platyrhynchos y A. strepera), o porrones europeos (Aythya ferina) y patos chuchara (Anas clypeata) nos mantenían entretenidos al telescopio, sin dejar de prestar atención a los cantos del rascón común (Rallus aquaticus), algunos ejemplares sueltos de gaviota reidora Chroicocephalus ridibundus) o a cómo una hembra de aguilucho lagunero (Circus aeruginosus) aportaba material al nido. También pudimos divisar varias especies en migración, como vencejos comunes (Apus apus), aviones zapadores (Riparia riparia), golondrinas comunes (Hirdundo rustica) o varios ejemplares de collalba gris (Oenanthe oenanthe), culminando una bonita mañana en la laguna de Meco.
Sin embargo, para algunos de nosotros no fue suficiente, y ya a última hora y más centrados en intentar fotografiar algún ejemplar, tuvimos otra de la sorpresa de la mañana, un precioso ejemplar de espátula común (Platalea leucorodia) y los primeros fumareles cariblancos (Chlidonias hybridus), que poseen en dicha laguna su único enclave de cría en Madrid. Tras estas especies ya si, nos despedimos d la laguna con la intención de no tardar mucho en volver a este vergel tan cercano a la gran capital.
Cristian Pérez-Granados