La golondrina común (Hirundo rustica) es un ave que se distribuye por el Holártico, habitualmente asociada a asentamientos urbanos en toda Europa. Tiene una amplia distribución en España y se trata de un pájaro bastante común. Se alimenta de insectos, presenta dimorfismo sexual (principalmente la cola del macho es más larga) y es migradora transahariana: llega en primavera y se va al final del verano a sus cuarteles de invernada africanos. La nidificación se realiza a menudo en el interior de edificios rurales, como cuadras y establos, o más urbanos, como garajes, y de forma colonial.
La población española se ha estimado recientemente en unos 30 millones de individuos. Sin embargo, en las poblaciones europeas se ha constatado un lento pero continuado descenso en promedio de un 21% en la última década. El impacto de las actividades humanas sobre la especie es enorme. Así, cambios en el hábitat, la pérdida de lugares de nidificación y posibles problemas muy poco conocidos en las áreas de invernada podrían estar detrás de este declive. Las condiciones de las áreas rurales de reproducción están sujetas a modificaciones en las prácticas agrícolas (utilización de pesticidas, etc.), mientras que durante la migración e invernada de la especie ésta depende de carrizales como lugares de reposo, ecosistemas frágiles y amenazados tanto en Europa como en África, lo que ha llevado al descenso de las poblaciones nidificantes en un gran número de países europeos.
La colonia de golondrinas de la UAM y el Grupo Ornitológico SEO-Monticola
En el aparcamiento subterráneo de la Universidad Autónoma de Madrid se encuentra una de las colonias de golondrina común más importantes de la Comunidad de Madrid. Cuenta en la actualidad con algo más de 100 parejas entre los meses de marzo y agosto. Su presencia es un gran valor natural para la universidad, ya que eliminan ingentes cantidades de mosquitos de la zona, adornan el campus con sus vuelos sobre las zonas verdes y además estamos obligados a conservarlas al tratarse de una especie protegida.
Esta colonia es objeto de seguimiento por miembros del Grupo Ornitológico SEO-Monticola desde 1998. En el marco del proyecto europeo Euring Swallow Project, los estudiantes de Biología y Ciencias Ambientales del la UAM comenzaron a estudiar la colonia de golondrinas. Así, desde 1998 y gracias a la subvención recibida desde el Decanato de la Ftad. de Ciencias, decenas de alumnos –cerca de 200– han llevado a cabo detallados seguimientos de su reproducción y se han anillado cientos de aves. Los alumnos han seguido el tamaño de las puestas y el número de pollos volados cada primavera. Así mismo, los estudiantes han marcado centenares de aves, aprendiendo a reconocer su edad y su sexo. Igualmente han constatado la elevada filopatria de la especie por su lugar de nacimiento.
Además del trabajo de seguimiento de esta población se han desarrollado otros proyectos con la especie. En el año 1999 gracias a una subvención de la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid se llevó a cabo una campaña de conservación de la especie en la Comunidad de Madrid, se editó un tríptico y un póster sobre la especie, sus problemas de conservación y la necesidad de conservarlas que fueron distribuidos por numerosos municipios madrileños y en la propia UAM.
Con todas estas experiencias e información, los alumnos de la UAM se han familiarizado con el diseño y ejecución de sencillos proyectos de investigación sobre la biología reproductiva de las golondrinas. Han aprendido a manejar las aves en su fase más delicada, a usar redes y otras herramientas propias del anillamiento científico de aves, a consultar y entender la bibliografía científica sobre las aves, a usar programas estadísticos para el análisis de datos, y a sintetizar los resultados y las principales conclusiones. Así mismo, numerosos estudiantes han aprovechado su dedicación a la colonia de golondrinas para realizar trabajos para distintas asignaturas de la licenciatura (y ahora grados) de Biología y de Ciencias Ambientales. A su vez, algunos de ellos han dado un paso más y han presentado los resultados en congresos sobre ornitología y también han publicado artículos en revistas divulgativas y científicas. Todo ello ha redundado en su formación como biólogos y ambientólogos.
Como ya hemos comentado, en el año 1998 se inició este proyecto con el objetivo de realizar un estudio y seguimiento de esta colonia, y a lo largo de estos años se han ido ampliando los objetivos iniciales de manera que a día de hoy está dividió en tres fases o subproyectos diferentes:
La colonia de golondrinas de la UAM está formada por unos 180 nidos de los cuales aproximadamente la mitad están ocupados
El seguimiento de esta colonia comenzó con el empuje del proyecto EURING-Swalow, promovido por la Oficina Europea de Anillamiento. Sus objetivos básicos pueden agruparse en tres apartados:
- – estudiar dos aspectos biológicos principales: variación en las tasas de supervivencia y dispersión natal, cuestiones ambas sólo abordables mediante anillamiento
- – proporcionar una aproximación a los efectos de las actividades humanas sobre las poblaciones de aves (seguimiento integrado) y una base científica para las estrategias internacionales de conservación de migrantes euroafricanos
- – estudiar estas dos cuestiones desde una perspectiva continental y a lo largo de todo el año
En la actualidad, el grupo continúa con el seguimiento. En cuanto a algunos apuntes sobre el seguimiento, con el proyecto EURING-Swalow el examen de la colonia se hacía completamente, se controlaban la totalidad de los nidos; y en el 2003, reajustando la metodología, se estudió la reproducción en una muestra de 106 nidos.
La colonia de golondrinas de la UAM está formada por unos 180 nidos de los cuales aproximadamente la mitad están ocupados. Respecto a su ubicación, muchos se sirven de las vigas y columnas de la construcción de estas cocheras como soporte mientras otros carecen del mismo. Por último, estos nidos se disponen desde poco más de 2 metros de altura a más de 6.
Metodología de trabajo
El seguimiento anual de la colonia se extiende aproximadamente entre los meses de abril, cuando llegan las parejas más tempranas, y agosto, mes en el que las parejas más tardías siguen criando los pollos de una segunda puesta. Para dicho seguimiento se realizan visitas semanales a la colonia, que suelen prolongarse entre 2 y 3 horas.
Al comienzo de la temporada se prepara para cada nido una ficha que debe irse completando en cada visita a la colonia. Esta ficha está propuesta para el proyecto EURING-Swallow por el Proyecto Golondrina de Euring. Manual de métodos de campo, compilado por Lukas Jenni. PDF ficha si se tiene
Cuando los pollos tienen una edad de entre 5 y 15 días, se procede a su anillamiento. El anillamiento de estos pollos en el nido posibilita que en años posteriores puedan recuperarse aves nacidas en la UAM, lo que permitiría determinar sus patrones migratorios, etc. Además, cuando en el futuro se realicen jornadas de anillamiento de adultos en la UAM, las recuperaciones de aves nacidas en esta colonia pueden definir el carácter filopátrico de las aves (querencia por el lugar natal para la reproducción) u otros factores interesantes.
Biometría de la Golondrina Común (Hirundo rustica) en Madrid
La biometría de las poblaciones de Golondrina común en el interior peninsular no está descrita aunque sí se dispone de información de distintas subespecies y poblaciones a escala continental. En ellas se registra una notable variabilidad biométria y diferencia morfológica entre sexos que refleja una clina latitudinal según la cual las poblaciones meridionales son de menor tamaño y poseen un dimorfismo sexual menos acusado.
En el presente trabajo se quiere contribuir al conocimiento de la biometría y dimorfismo sexual de las poblaciones de Golondrina común del interior peninsular aportando datos que se suman a los ya publicados.
Más información sobre este trabajo y sus resultados pueden verse en la siguiente comunicación (PDF): Biometría y sexado de golondrinas de la colonia de la UAM.
La migración
Las aves migradoras presentan unas áreas de cría en primavera-verano donde se reproducen y unas áreas de invernada donde pasan el invierno. Los desplazamientos entre estas áreas se denominan movimientos o viajes migratorios. Los realizados a final de invierno o principios de primavera entre el área de invernada y la de cría se denominan migración primaveral o prenupcial, y los realizados a final del verano o principios del otoño migración postnupcial u otoñal. La zona por la que realizan el recorrido los individuos de una especie entre las dos áreas se denomina ruta migratoria.
La golondrina es una especie migradora transahariana de larga distancia. Es decir sus áreas de cría e invernada están separadas por varios miles de kilómetros invernando en el África subsahariana.
Los problemas de conservación de las aves migratorias
Se ha determinado que el declive de muchas especies de pequeñas aves europeas se debe a problemas en las áreas que atraviesan en sus migraciones o en las áreas de invernada. En el caso de la golondrina se conoce a grandes rasgos cuales son estas zonas. Sin embargo no se sabe cuáles son los cuarteles de invernada de las poblaciones españolas de golondrina.
Objetivos del proyecto:
- Determinar mediante el uso de geolocalizadores las rutas migratorias y áreas de invernada de la población de golondrina de la colonia del campus de la Universidad Autónoma de Madrid con el objeto de aumentar su conocimiento y mejorar su conservación. Se trataría del primer estudio desarrollado sobre este aspecto con las poblaciones de golondrina del sur de Europa.
- Seguir involucrando a los alumnos de la UAM en el diseño y ejecución de un proyecto de investigación. Se familiarizarán con el uso del anillamiento científico de aves y con la utilidad de la información generada con las anillas metálicas convencionales y con los novedosos geolocalizadores.
Metodología: geolocalizadores
Los geolocalizadores son dispositivos que proporcionan localizaciones en base a la geolocalización. Ésta se basa en estimar la posición geográfica a parir de la hora de amanecer y anochecer y del número de horas diarias de luz. Llevan incorporados un sensor de luz que mide las variables cada poco tiempo, además de un reloj interno y un data logger que acumula las lecturas del fotorreceptor y la hora asociada. Con esta información se puede estimar la latitud con la duración relativa del día y de la noche. La longitud se estima en base a la hora UTC del mediodía y de la medianoche. Es la mejor opción disponible para el estudio de la migración en pequeñas aves dado su bajo peso. Sin embargo, es preciso recapturar al animal para descargar la información y con aves de pequeño tamaño se lleva utilizando muy pocos años y los primeros resultados se están publicando en la actualidad.
En el caso de las golondrinas de la colonia de la UAM las probabilidades de captura y recaptura son muy elevadas. De la experiencia acumulada durante los últimos años se desprende que se pueden capturar la práctica totalidad de los adultos que regresan cada primavera para criar.
En la primavera-verano de 2012, anilladores y miembros del grupo, junto con alumnos de la UAM y otros asistentes a las jornadas, realizaron la captura de numerosos ejemplares de golondrinas. De ellos se eligieron 20 adultos de esta colonia para colocarles un gelocalizador de 0,6 gramos dispuesto con un pequeño arnés en la espalda. Los elegidos eran aves adultas, ya que presentan una mortalidad mucho menor a las jóvenes y su tasa de retorno a la zona de cría es muy superior respecto a las aves jóvenes. También se seleccionaron solo ejemplares machos, debido a la tasa de retorno favorable a este sexo observada en la colonia. Este método ha sido empleado ya por otros investigadores con buenos resultados con diversas especies de pájaros.
Resultados preliminares y difusión
Durante la primavera-verano del 2013 se realizaron 14 jornadas de anillamiento para tratar de recuperar los ejemplares marcados. En total se recapturaron 2 individuos adultos con geolocalizador.
A priori, los resultados de fechas y parámetros de migración indican que recorrieron entre los viajes postnupciales y prenupciales (en dirección a los cuarteles de invernada y de regreso a los reproductores respectivamente) más de 6000 kilómetros y en ambos casos alcanzaron la colonia nuevamente a mediados de marzo. Se puede interpretar por tanto que las golondrinas del campus de la Universidad Autónoma de Madrid son migradoras transaharianas.
Los dispositivos analizados presentan diferencias en el recorrido, la distancia y el tiempo invertido entre la migración otoñal o postnupcial.
Los cuarteles de invernada detectados para las golondrinas de la colonia de la Universidad Autónoma de Madrid se localizan en las áreas subtropicales y tropicales de Ghana y Costa de Marfil, ya descritas en recapturas de aves anilladas.
La ruta primaveral o prenupcial fue más directa y breve, similar para ambos ejemplares, accediendo a la Península, probablemente, por el Estrecho de Gibraltar y alcanzando el centro peninsular a mediados de marzo. La trayectoria parece indicar que ambos atravesaron el continente africano prácticamente en línea recta desde sus posiciones subsaharianas. Probablemente, la urgencia reproductora llevó a los dos machos a atravesar el desierto. Las velocidades medias (90-140 km/día) fueron superiores a las marcas obtenidas en el recorrido otoñal.
La información de estos dispositivos está disponible de un modo divulgativo en la página web www.migraciondeaves.org perteneciente a la acreditada organización SEO/BirdLife que lleva más de 50 años dedicada al estudio y conservación de las aves y sus hábitats. En este portal se muestran los resultados recogidos por otras muchas iniciativas en las que también se están empleando geolocalizadores.
El proyecto y los geolocalizadores aportaron más información que estamos aún procesando y esperamos publicar pronto.
Desarrollo de una visita a la colonia de Golondrina Común
A diferencia del Avión Común, la Golondrina Común no cierra completamente el nido sobre el techo (u otro nido) que se sitúa por encima de él, sino que éste queda como una plataforma alejada varios centímetros del techo. Este aspecto permite el estudio de la evolución de cada nido (material que contiene – huevos – pollos) mediante la utilización de un espejo acoplado a una barra telescópica.
Si con el espejo resulta imposible contar y datar los pollos de un nido, el rigor exige utilizar una escalera para acceder con cuidado al mismo con objeto de contar y datar los pollos en mano.
Estas manipulaciones no parecen ser perjudiciales ya que no se conoce ningún caso en que los padres hayan abandonado una nidada; cualquier perjuicio derivado de dicha manipulación podría conocerse fácilmente gracias al exhaustivo control de las nidadas.
Una vez con el pollo en la mano, se procede a la estimación de su edad de desarrollo en días, que no siempre coincide con la edad real en días naturales ya que el aporte de alimento es determinante y el pollo puede presentar superdesarrollo o subdesarrollo.
Cuando los pollos tienen una edad de entre 5 y 15 días, se procede a su anillamiento.
Antes de realizar el control de cada nido se miran las anotaciones de la semana pasada, especialmente la edad de los pollos para aproximarse a la posible edad de esa semana. Si determinado día los pollos podrían estar ya muy desarrollados, con más de 15 días, el nido no se controla ante la posibilidad de forzarlos a volar.